LATE CORAZON
CAPITULO 1
ESCRITO POR PISCIANO
Esta es la historia de Karlos y Omar hasta el
momento dos amigos que solian estar juntos permanentemente y disfrutar de
salidas, borracheras el bar de la ciudad.
Karlos tiene unos 35 años y Omar 34, este
último a punto de casarse y dejar de frecuentar este lugar por pedido de su
novia.
Roxana novia de omar, manejada por su padre
Andres Sotomayor, un empresario renombrado y un prestigio que había que
mantener.
Andres:- nadie se burla de un Sotomayor.
Roxana:- ya lo se papa, pero aun no estoy
casada con el.
Andres:- que esperas para atraparlo? Necesito
que omar aprenda a manejar la empresa y a cuidar el patrimonio de la familia,
ya que tu decidiste estudiar esa tontera de nutricionista, necesito que hables
con el, ya es hora que decidan casarse y también darme un nieto.
Roxana:- vas muy rápido papa, no se si quiero
tener un hijo todavía.
Andres:- por lo menos empieza con casarte y
dejar de lado tus saliditas y permitirle que el salga también.
Karlos era todo un solteron, vivía la vida
divirtiéndose con cuanta mujer se le presentaba.
La idea de casamiento que su amigo omar le
había mencionado lo tenia loco.
Como podía su amigo de juntada atarse a una
mujer?
Por suerte Omar no tenia la misma cabeza.
Se había enamorado y ya comprometido con
Roxana no había marcha atrás.
Aunque su suegro lo tenia agarrado de huevo
como solia decir.
Sin embargo había que aprovechar los últimos
tiempos que le quedaban de soltero.
Karlos se encontraba en el gimnasio, si bien
tenia bastantes equipos en su casa pero consideraba una necesidad visitar el
gym una vez por semana ya que en su casa no era lo mismo.
Casualmente se cruzo con otro chico que
ocupada su maquina favorita.
Sin hacer problema se coloco en la de al
lado.
Karlos:- que onda? Eres nuevo?
Orlando:- si empece ayer, tu también lo eres?
Karlos:- pues no, pasa que vengo una vez a la
semana.
Orlando:- ah bien, soy Orlando.
Karlos:- yo Karlos, un gusto.
Orlando:- el gusto es todo mio.
Había una sonrisa atípica en este chico que a
karlos incomodo un poco, pero continuo con el ejercicio.
Era mas que obvio que Orlando esta fascinado
con el cuerpazo que Karlos tenia.
Era imposible disimular.
Orlando:- y la novia?
Karlos:- cual novia?
Orlando:- estas de novio?
Karlos:- claro que no, yo no soy de tener
novias. Digamos que no es lo mio.
Orlando:- entiendo.
Realmente Orlando no había entendido nada.
Pues en su cabeza dibujo que Karlos era tan
gay como el.
Karlos:- que tanto me miras?
Orlando:- es que eres muy guapo, como es que
nadie te ha atrapado ya.
Karlos podría haber reaccionado mal, pues
este chico se le estaba lanzando, pero sono su celular y contesto todo
sonriente.
Omar:- de que ries?
Karlos:- ja, nada man, una tontería. Que
haces?
Omar:- llamándote, nos veremos esta noche?
Karlos:- por supuesto. No me perdería una
salida contigo ni loco.
Omar:- pues en el bar entonces?
Karlos:- claro, alla nos vemos.
Orlando:- mira nomas como te dejaron, basto
un llamado para que tu cara se alegrara.
Karlos:- es mi amigo.
Orlando:- un amigo solamente?
Karlos:- que te pasa? Mejor me largo de aquí
para no romperte la cara, maricon.
Ya estaban en el bar.
Típico bar de barrio, viejo, pequeño
necesitado de pintura.
El bar posee una sala de juegos cartas, dados,
domino y una sala privada donde se ofrecía a los clientes ver películas
pornográficas.
El bar no tiene nada de malo, pero allí
acuden hombres que disfrutan su soltería o más bien para consolarse con un
trago cuando las cosas en su matrimonio no van bien.
Por lo general son todos hombres, pero como
es de esperarse cada dos por tres un par de chicas se hacen presente con el rol
de entretener a todos.
Por esa clase de situaciones, es que la novia
de Omar no quiere que su futuro marido visite este sitio.
Lo mas extraño es que Omar le daba la razón a
su novia y no le hacía caso a Karlos.
Karlos que era todo un solterón que decía que
el hombre necesita entretenimiento y que si tuviera mas carácter Omar se
negaría al pedido de su novia.
No podía abandonar los gustos que hace años
se daba.
El bar es un lugar habitual donde se suele
hacer amistades cada día.
Pero además de aquello siempre estaban los
inseparables, aquellos que siempre se juntaban y que se emborrachaban y vivían
siempre juntos como hermanos.
Karlos es mas fortachón, mujeriego, solterón,
del típico hombre que no le van los compromisos sino de pasar el rato.
Adicto al deporte más bien al boxeo que
entrenaba permanentemente pero cada vez le costaba mas por el tema del alcohol
que no es bueno para nadie y mas cuando se quiere llegar a tener una figura atlética,
en fin no lo podía evitar.
Esa noche Omar y Karlos estaban ahí, como de
costumbre, en aquel bar tomando como locos de la cabeza, riéndose de la vida y quejándose
Omar por lo que se iba a casar y estar atado a una mujer y a la casa y dejar de
lado esto que era llevar una vida de soltero, pero que va, como el dice el
suegro lo tiene agarrado de los huevos para que se case y además era hora de
sentar cabeza y formar una familia.
Para aflojar a la bebida Karlos pidió un mazo
de cartas para jugar un rato.
Karlos:- y a que jugamos?
La clásica pregunta de siempre, no se a que
preguntaba si siempre terminaban jugando a lo mismo.
El chinchón era el juego preferido ya que el
truco no lo entendían nada.
Omar:- que va… chinchón obvio man.
Luego de jugar y ver que los tantos iban
empatados Karlos se decidió apostar por algo.
Siempre apostaban tonterias, como quien de
los dos se animaba a tocarle los pezones a la flaca que atendía las mesas, y el
gusto por verla como se enfadaba cuando uno de estos lo hacia, pero aquella
noche lola no estaba en el bar.
Que apostar ahora....?
Omar:- …el que pierda le da fondo blanco al
tequila.
Era una apuesta considerable.
Era gracioso ver como se desmayaban de la
borrachera que tenían.
Se la pasaron jugando y el juego aun no lo
terminaban pues ganaba Karlos y luego Omar y así mantenían los tantos casi
iguales que al comienzo.
Ya habían pasado las horas y el bar debía
cerrar.
Omar:- el bar va a cerrar y nada que se
define esto, deberíamos dejarlo pendiente.
Karlos:- y abandonar el tequila? Por favor, gastamos
el ultimo dinero que nos quedaba en los bolsillos para que ninguno de los dos
lo termine? Noo.. Mejor vamos a casa, y seguimos jugando.
Omar:- ok. Todo sea por no dejar este
tequilita.
Camino a casa de karlos…
Karlos:- que cara tienes… porque tan
pensativo?
Omar:- debería dejar de hacer esto, Roxana mi
novia no deja de pedírmelo.
Karlos:- necesitas tener tu espacio, amigo, a
caso ella no sale con amigas?
Omar:- si, lo se, pero digamos que es
complicado, siento que nunca estoy a la altura para ella.
Karlos:- menos mal que yo no estoy atado como
tu.
Omar:- atado no, bueno, no es esa la
definición, solo que… olvídalo no lo entenderías.
Karlos:- entender que? En querer atarme a
alguien para tener relaciones… si no estoy atado es porque no soy de nadie y de
todas.
Omar:- porque no te has enamorado, pero
cuando lo hagas…
Karlos:- jamas voy a enamorarme, que dices.
No creo lograrlo que eso pase.
Omar:- eres un chico guapo, ya llegara la
persona que vuele tu cabeza y será ahí que me daras la razón.
Karlos:- jaja, a ti también te parezco guapo.
Omar:- sabes que lo eres, sino no te
entrenarías.
Una vez en la casa de soltero de Karlos típica
casa de entrenador lleno de pesas por las que se tropezaban desde que entraron
a la casa, se reían de ellos mismos.
Pues las copas se les habían pasado.
Tanto que las cartas casi ni las veían pero
eran duros de derribar siguieron jugando.
Omar:- oye man pasa el tequila y tomemos un
fondito cada uno, esto es fuera de juego.
Karlos:- esta bien.
Y así brindaron y sácate les cayo mas fuerte
la borrachera y luego se vino algo de música y cantaban mientras seguían
jugando.
Seguían frente a frente ahora Omar iba
ganando y Karlos comenzó a ponerse nervioso, era del tipo del cual los desafíos
los tomaba tan a pecho que era ganar o matar.
Omar:- parece que la suerte esta de mi lado.
Karlos:- mejor cállate, y no trates de
confundirme.
Omar:- pareces nervioso.
Karlos:- nada que ver.
Karlos se estiro para ponerse mas cómodo y
relajarse.
Se estiro tanto que la pierna izquierda fue a
dar entre las dos de Omar por debajo de la silla.
Omar se abrió y cerro atrapándole la pierna
sin soltarla.
Karlos:- oye, que haces?
Karlos quería sacársela pero no podía en este
juego tan tonto con el solo propósito de voltear a Karlos que por cierto lo consiguió.
Esto colmo la escena de carcajadas por parte
de Omar cuando Karlos quedo de culo en el suelo.
Karlos:- de que te ríes? No es gracioso, ven ayúdame
a levantarme.
Omar trato de sujetarlo pero no podía
mantenerse de pie tampoco por lo que cayó también.
Karlos aprovecho la oportunidad y se estiro
hacia donde Omar estaba para atacarlo a cosquillas y golpes por burlarse de el.
Omar le trabo las manos sus golpes eran
bastante rudos y dolían tanto que le tiro el sillón encima trabándolo enseguida
y se dirigió al cuarto de Karlos y se escondió en un armario.
Karlos:- oye, ven aquí.
Típico juego de niños, mejor dicho de
borrachos que les da risa todo lo que hacen pero esto iba a llegar a tal punto
que....
Karlos:- Omarcito donde estas man... aparece
hijo de perra donde te has metido?
Karlos estando casi enfrente del armario abrió
la puerta y salió Omar dándole un empujón inesperado.
Tanto que fueron a parar los dos tumbados en
la cama de Karlos.
Forcejearon como si luchaban de verdad hasta
que ahora Karlos acorralo a Omar sin darse cuenta de que este había roto su
camiseta, al notarlo opto por quitarle el pantalón dejándolo en calzoncillos.
Y luego arranco su camisa sin dejarle un botón
cocido.
Omar no se quedo atrás también le quito los
pantalones de Karlos sin lograr quitarlos del todo.
Karlos:- jajaja me quieres ver en calzones Omarcito.
Karlos se quito el cinturón y se bajo los
pantalones.
Y volvió al ataque.
¿Que estaba pasando?
La cosa había llegado lejos los dos estaban
casi en pelotas.
Claro que ya se habían visto con el torso
desnudo porque habían tenido alguna que otra pijamada pero nunca en calzones.
No era normal lo que estaba pasando.
Luego de golpearse tanto Karlos agarro la
cinturilla del calzoncillo y soltó provocándole un latigazo en los glúteos de Omar
si bien no dolió, pero en la mente de Karlos estaba el clásico de agarrar el elástico
de los hombros del corpiño de las mujeres y soltarlo provocando aquel sonido de latigazo contra el cuerpo.
Omar:- que te pasa gil?
Omar comenzó a tener una grandiosa erección
de su pene.
Karlos se percato de esto y le agarro las
bolas y le empezó a ser cosquillas.
Omar:- oye, basta no hagas esto.
Karlos:- que pasa? No te gusta jugar a esto?
Omar:- a ti si? Marica.
Omar no dudo en tocarle la polla y frotarlo
con su mano.
Ambos sintieron un inmenso calor no solo en
sus pollas y huevos sino en todo el cuerpo.
El movimiento de sus manos bruscas a veces
con movimientos de vaivén.
Ninguno de los dos sentía insatisfacción al
contrario se excitaban aún más. Nada mejor que un hombre para saber lo que a un
hombre le gusta cuando le agarran la polla.
Muecas de placer que se provocaban uno del
otro estaba ocurriendo lo inevitable.
Hasta llegar al punto de estar frente a
frente y perderse en un apasionado beso que los dos deseaban.
Omar:- que guapo eres…
Luego vino el momento de deshacerse de los
calzones quedando completamente desnudos sintiendo el roce de sus penes y el
leve toque de sus labios hasta que Karlos abrió su boca y beso a Omar con mas ganas
y con mas fuerza.
Karlos empezó a buscar un agujero donde
penetrar.
Omar accedió quedándose de costado.
Karlos lo tomo de una pierna abriéndolo para
poder hacer de lo suyo.
Costo encontrar el agujero y cuando este lo
hizo se metió en el cuerpo de Omar gimiendo de placer y Omar chillando de
dolor.
Omar:- basta basta, por favor, no sigas…
Karlos no se detenía por nada.
Quería sacarse esas ganas tremendas que tenia
de hacerlo, sin duda quería acabar dentro de el hasta que lo consiguió dejándolo
lleno de leche por dentro.
Omar estaba con mucho dolor en la cola.
Omar:- porque hiciste eso?
Karlos:- que mas da? Puedes hacerlo también.
Karlos accedió a ponerse en cuatro y también
dejarse follar.
Aquí vino el desquite de Omar.
Omar:- ok, ahora te toca pagar por mi dolor.
Omar lo penetro con fuerza y cada vez lo
hacia mas intenso.
Karlos hasta quiso llorar de dolor, aquello
era tan doloroso como excitante.
Hasta que estallo también.
Increíble lo que ambos habían hecho.
Luego de terminar de correrse cada uno quedo
satisfecho.
Acababan de experimentar juntos algo nuevo,
algo distinto que no sabían explicar como fue que sucedió.
Ambos se tumbaron a dormir.
Los dos acurrucados al lado del otro
sintiendo como sus corazónes latían de tanta adrenalina.
Ya de mañana ya se había dormido lo
suficiente Karlos fue el primero en despertar ya que la luz del sol daba justo
en los ojos.
El dolor de cabeza impedía sentirse con mucha
estabilidad.
Inmediatamente noto que estaba completamente
desnudo y la mente lo llevo a recordar el placer experimentado la noche anterior.
Los besos, las caricias, el agarron de sus
pollas, todo revoloteaba en la mente de Karlos.
Esto no puede estar pasando pensó.
Seguramente fue un sueño dijo el o pesadilla
en todo caso.
Se voltio y comprobó que lo que supuestamente
lo tomo como un sueño había pasado en realidad cuando vio que Omar dormía a su
lado completamente desnudo y con la cola colorada y con resto de sangre en las
sabanas.
Por dios que habían hecho?
El se levanto como pudo ya que el también
estaba delicado de sus muslos estos estaban ardiendo casi no pudo sentarse a la
orilla de la cama y se puso de pie enseguida.
Fue hasta la cocina encendió la hornalla y
puso agua a calentar y se agarraba la cabeza, y se repetía una y otra vez que
paso?
Que hicimos?
Tenía la polla colorada de el modo frenesí
con el que lo había hecho.
Cuando Karlos giro para ir de nuevo al cuarto
se encontró con Omar detrás suyo.
Ambos se miraron con impotencia sin cruzar
palabra.
Ni un buenos días, solo se miraban y ambos
respiraban con aire entrecortado y con un nudo en la garganta.
Hasta que Karlos por fin rompió el silencio.
Karlos:- puse agua a calentar para café voy a
darme una ducha.
Le dio una palmada en la espalda.
Mientras Omar intentaba disimular poniendo su
mejor cara.
Karlos se metió al baño dejando la puerta
abierta.
Karlos se volvió hacia la puerta del baño y mirándolo
a Omar que se había quedado quieto en la cocina tuvo otra ocurrencia.
Karlos:- Si quieres nos bañamos juntos.
Eso debió molestar mucho a Omar por lo que lo
enfrento enseguida.
Omar:- Pero quien te crees que soy, hijo de
puta. Yo no soy quien para bañarme contigo.
Karlos:- Discúlpame Omar, no quiero
molestarte, solo le estoy poniendo onda a esto que paso.
Omar:- aquí hay un error entre nosotros no
puede pasar nada, somos amigos, éramos amigos.
Omar se voltio para ir al cuarto a recoger
sus cosas y marcharse ya.
Karlos:- a donde vas?
Omar:- me voy no tengo nada que hacer aquí.
Karlos:- no te quedaras al café?
Omar:- vete al diablo.
Omar se fue y Karlos se metió a bañar.
Karlos se encontraba todavía desconcertado
por lo que había pasado, pero al recordarlo y repetirse de que no era posible
que dos hombres... dos amigos se... hay dios su pene le pedía a gritos que lo
frotara.
Karlos Se había puesto caliente otra vez y empezó
a masturbarse con delicadeza, su pene estaba sensible al tacto.
Nunca había sentido algo parecido y esto que había
penetrado varias colas y vaginas pero recordaba vagamente que le costo mucho
insertar la cola de Omar.
Sin duda era una cola virgen.
Una cola de un hombre jamás penetrado.
Basta se dijo así mismo.
Piensa en una chica muy muy guapa que se esta
quitando el sostén y te invita a que le toques las tetas....
Definitivamente eso daba resultado.
Su mente poderosa antes de acabar imagino la
cola de Omar cogiéndola fuertemente enculadas hasta que chorreo el baño de
semen.
Continúo bañándose hasta que lo detuvo el silbido
de la tetera.
Salió del baño envuelto en toalla.
Y solitario como siempre tomo café y su mente
siguió.
Karlos:- soy heterosexual, lo sigo siendo
Inconscientemente hace minutos había tenido
el mejor orgasmo de su vida recordando lo pasado entre el y su amigo.
Sin duda esto a un hetero como el, lo ponía
de los pelos.
Continuara…

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